El inicio del 2017 es, para nosotros, el comienzo de algo nuevo. La parte más visible de este proyecto toma forma y… ¡Ve la luz! Nace la web Psicooncología online y a nosotros nos nacen los agradecimientos, pues detrás de esta ventana que abre al mundo nuestro proyecto, hay muchas personas que lo han hecho posible…
INFINITAS GRACIAS A…
♦ ELISENDA ESCRICHE, creadora y responsable principal de esta web. Serás nuestra web manager, community manager… Pero, sobre todo, eres nuestro mejor ejemplo de que la experiencia en cáncer importa. Ese es el valor añadido de este proyecto y tú, su mejor reflejo…
♦ NARROWCASTING BCN, concretamente a Álvaro, Juan y Lita, por materializar esta web. Habéis comprendido nuestras ideas y las habéis convertido en nuestra ventana al mundo…
♦ SÍLVIA PLAJA, autora de la fotografía de portada de la web, que no ha dudado en colaborar desinteresadamente en este proyecto, invirtiendo horas de su tiempo libre (y nos consta que tiene poco… lo cual multiplica la importancia de su gesto). Sílvia, tu fotografía embellece la puerta de nuestra web…
♦ ANNA, por el tiempo y el cariño dedicado a la traducción de la web. Moltes gràcies! Thank you very much!
♦ El REFUGIO, es decir: Laura, Cristina, Charo y Elisenda, por permitirnos mostrar vuestra imagen y vuestras palabras… Somos conscientes de lo que habéis vivido y sabemos que no es fácil compartirlo aquí. Con vosotras empezó el proyecto Psicooncología online, que cada día crece y llega un poco más lejos…
♦ FAMILIARES y AMIGOS, por el apoyo, los ánimos y la comprensión, porque las horas de más, invertidas en el desarrollo de esta web, han sido horas de menos con vosotros…
Ahora se dice que un hombre de cada dos tendrá cáncer, yo ya lo he tenido y al menos, de momento, he podido superarlo ¿Cómo? Existen muchos factores, en mi caso, he tenido un año de profundas reflexiones en mi tratamiento, para darme cuenta de todas y cada una de las circunstancias que han incidido en su eliminación.
He trabajado 11 años junto a vosotros en el ICO, enterré a mi segunda mujer de un cáncer de colón y por último he padecido un cáncer de lengua, he visto y conocido todo lo que se puede saber sobre cáncer, he sido familiar directo de una paciente y por último he padecido yo mismo la enfermedad, creo, pues, que puedo hablar con un mínimo de conocimiento de causa.
Hoy puedo asegurar que el cáncer no es sinónimo de muerte, simplemente es el precio que debemos de pagar por el tipo de vida que llevamos, unas veces elegidas y otras impuestas por nuestro entorno, y empezar por asumir, cuando llega, que hay que padecerlo y superarlo es el comienzo.
En primer lugar debemos analizar el punto de partida, ¿En qué estado de salud nos encontramos? La edad es secundario, ¿Qué nivel de conocimiento y de información disponemos sobre la enfermedad? Con lo que nos dicen no basta y por último descartar y superar el miedo.
Fui al dentista para revisar la boca y me derivó a Bellvitge, me hicieron una biopsia (lo más doloroso de todo el proceso), me diagnosticaron un cáncer de lengua y me aconsejaron operarme, extirpando parte de la mandíbula, lengua, cuerdas vocales y ganglios, con lo que hablaría con el estómago con rehabilitación y comería de por vida a través de una sonda naso-gástrica alimentos en estado líquido o semi-sólido.
Ejercí mi derecho como paciente, a elegir mi tratamiento, y me negué rotundamente a seguir viviendo mutilado, la vida merece la pena vivirla cuando puedes disfrutarla y por otro lado siempre después de una operación el cuerpo queda debilitado y yo necesitaba estar físicamente lo más fuerte posible para afrontar una quimioterapia y una radioterápia muy duras.
Y comenzó el calvario, 3 sesiones de quimio cada quince días con bomba de administración en la cintura y luego 35 sesiones de radioterápia. Yo comencé pesando 96 kilos con una prostatitis benigna de muchos años, totalmente abstemio pero gran fumador, tenía los riñones mayores de lo habitual y al final de la quimio había eliminado totalmente al cáncer y sus posibles efectos secundarios, pero me aconsejaron que tenía que pasar por la radioterápia si no quería que se reprodujera. El tratamiento no duele par nada, pero me dejó la boca en carne viva durante meses debiendo comer solo batidos con sonda.
Cuando terminé pesaba 72 kilos había perdido el sentido del gusto que solo al cabo de mucho tiempo he ido poco a poco recuperando sin que llegue nunca a ser como antes y me ha quedado una sequedad de boca crónica por haberse atrofiado las glándulas salivares obligándome a beber agua con regularidad.
Han pasado casi dos años y hoy me encuentro perfectamente de salud, he recuperado peso, peso ya 82 y quiero seguir engordando por si vuelve otra vez. Como de todo y disfruto sin problemas todo lo que puedo, como siempre hice, de la vida.
Finalmente hablaré de lo que os interesa, que es estado anímico y mental, yo jamás pensé en lo que me ocurría, lo asumí como natural y si tenía que vivir o morir era porque tenía que suceder, al fin y al cabo de algo tenemos que morir, yo nunca he sido especialmente creyente pero nunca me ha asustado la muerte, quizá porque la he sentido y vivido muy próxima no solo en el trabajo sino en mi entorno y siempre he considerado que si tuvimos un principio debemos asumir como natural que debe existir un fin habiendo hecho los deberes, yo ya jubilado ni tengo preocupaciones ni estrés, hice en la vida todo lo que pude y me dejó, tengo personas que me quieren y he sido y soy feliz, duermo como un niño y cuando me tenga que ir, sinceramente me moriré con tremenda curiosidad por descubrir si hay algo después pero ¿Dolor? Para eso están las curas paliativas, hoy con la medicina moderna cada vez se supera mejor.
¡Qué gusto que seas tu Fernando quien estrene este blog! Siempre has sido todo eso que transmites en tu relato y ahora, si cabe, con más intensidad vital.
Compañero de trabajo y un gran testimonio de lo complicado que se pueden poner las cosas y la tremenda naturalidad con la que algunos conseguís afrontarlo. Siempre reconociendo la dureza y exigencia de este proceso, que se agradece para no quitar importancia a lo que supone.
Fuerte abrazo de todos tus chICOs y chICAs de por aquí!
¡Infinitas gracias Fernando, por compartir aquí una pincelada de tu experiencia! ¡Todo un ejemplo a seguir! Disfruta de tu jubilación y de la VIDA en el sentido más amplio posible.
Un abrazo lleno de paz…